¿Qué es un CMS? Conoce la gestión de contenido web al alcance de todos.

Escrito por Gacelaweb1 en marzo 21, 2019. Publicado en Blog, Marketing Digital.

Hasta hace no muchos años, si un usuario medio quería gestionar una página web necesitaba tener una base de conocimientos informáticos. Hoy en día, esta tendencia ha cambiado gracias a los CMS, o gestores web, que permiten a cualquier usuario actualizar los contenidos de una web casi como si editásemos un documento en Word.

Pero, ¿Qué son los CMS?

CMS son las siglas de Content Manager System o lo que en castellano traduciríamos como sistema de gestión de contenido. Estas herramientas son capaces de gestionar grandes cantidades de información (tanto textos como imágenes o vídeos) y ordenarla de manera que respete la estructura de la web. En pocas palabras, estas aplicaciones permiten al usuario poder modificar el contenido de la web sin tener que editar nada en lenguaje de programación.

Este tipo de programas, junto a una gran variedad de themes aplicables, han abierto la oferta al usuario medio que, sin tener grandes conocimientos de informática, puede editar su propia web. Pero, como todo, esta facilidad no es aplicable a páginas complejas con diversas funcionalidades en las que siempre va a ser necesario los conocimientos más avanzados de un programador.

En términos técnicos, siempre hablando de programación PHP, el funcionamiento de un CMS consiste en una serie de scripts que se ejecutan y transforman el contenido de una página web en código Html. Los datos y las reglas necesarias para ello se recogen en bases de datos, lo más habitual en este tipo de tecnología es usar una en MySQL.

La amplia oferta de CMS ha hecho que crezca el número de páginas web y aumente la competencia entre ellas, sobre todo en posicionamiento SEO.

Un poco de historia…

No podríamos conocer la esencia de los CMS sin conocer, brevemente, su historia. El primero que apareció en escena fue el llamado TYPO 3 en 1997, desarrollado por el informático Kasper Skarhoj. Este gestor evolucionó durante dos años hasta llegar a ser un Software de código abierto (open source), es decir, accesible por cualquiera. Este primer gestor sigue en funcionamiento y fue el precursor de otros sistemas posteriores.

Pocos años después de la aparición de TYPO 3 llegó, en 2001, Drupal. No sería hasta 2003 cuando apareció WordPress y dos años más tarde lo haría Joomla. Gracias al éxito de estos tres gestores se han formado comunidades de seguidores y desarrolladores que, en la actualidad, permiten grandes opciones de personalización de cada uno de ellos.

¿Cuál ha sido su evolución y hacia dónde van?

Lógicamente cada CMS ha seguido su camino de acuerdo, en gran medida, a lo que demandaban sus usuarios, pero, si hablamos de los “grandes” o los más usados, la especialización ha sido la clave de cada uno.

Por ejemplo, a la hora de crear un blog la herramienta que más destacaba era WordPress. Este CMS, tras una gran evolución tanto de la raíz como de los módulos, se ha convertido en el más utilizado por la facilidad para editar todo tipo de elementos, ya sea a través de su plataforma o de implementaciones que facilitan la gestión.

Con el paso del tiempo WordPress es una herramienta versátil que no solo gestiona páginas webs informativas si no que, además, también ofrece la posibilidad de convertirlas en e-commerce (aunque no es lo más habitual).

Por su parte, Joomla y Drupal permiten aplicaciones parecidas a WordPress, sin embargo, su utilización, en ocasiones, requiere de un nivel más alto en cuanto a programación ya que sus editores no son tan “visuales”.

En cuanto a tecnología de programación, PHP copa, aproximadamente el 80% del mercado frente a programaciones en ASP. NET, Java u otros más recientes como Ruby o Phyton, que han visto reducida su cuota de utilización. Si esta tendencia continúa, quizá, en un futuro, los gestores de contenido como DotNetNuke, Oxite, Umbraco, Django o Alchemy podrían desaparecer o tener un uso muy residual.

Sin embargo, y volviendo a la especialización como clave de éxito para cualquier gestor, Joomla, WordPress y Drupal no cubren todas las necesidades del mercado. A la hora de desarrollar sitios web específicos, como e-commerce, existen multitud de opciones disponibles. Si bien es cierto que WordPress ofrece el plugin Woocommerce, este no ofrece algunas opciones que una empresa puede necesitar en su venta online. Para este tipo de desarrollos suelen utilizarse plataformas como Prestashop y Magento, totalmente personalizables en cuanto a transportes, cambios de moneda, tipos de usuarios, ofertas, etc.

Otro de los casos de necesidades específicas son los sitios denominados e-learning. Estas páginas, actualmente en auge, requieren utilidades demasiado específicas como para desarrollarlas a través de plugin y módulos. Para estos casos existen plataformas como Moodle, utilizada por gran parte de los centros educativos.

¿Qué puedo esperar de un CMS?

Con todas las opciones comentadas, el usuario dispone, en la actualidad, de una gran oferta de plataformas CMS para desarrollar sitios web. Sin embargo, lo primero a la hora de desarrollar un proyecto de estas características es conocer qué funcionalidades necesitarás, si quieres o no gestionarlo tú mismo y, a partir de ahí, definir cuáles son los CMS y Themes que más se adaptan.

Casi todos los CMS de plataforma, además, disponen de funcionalidades “extras” que se añaden a través de plugins o módulos. Estas características pueden ser de todo tipo: gráficas, de rendimiento, de mejora de usabilidad, para gestionar el posicionamiento en buscadores, ver la analítica web, etc.

Estas funcionalidades, que a priori se presentan como una ventaja en la programación, si no se escogen adecuadamente, pueden ofrecer problemas de incompatibilidades, actualizaciones, desconfiguraciones, etc. Por ello, desde Gacelaweb te invitamos a que conozcas las ventajas que puede ofrecerte una agencia de desarrollo web integral: diseño, desarrollo, programación, flexibilidad, experiencia, gestión del proyecto y sobre todo soporte, mantenimiento y la tranquilidad de contar con un producto acabado y listo para usar.